A sus 39 años la vida le pone por delante una durísima prueba.
Después de 28 días de lucha desesperada por la vida, a la vuelta del infierno: miedo, angustia, ansiedad...No hay medicación que pueda controlar su desesperación.
¿O tal vez si?. Entra su mujer, lo coge de la mano y se queda con él, no hace falta hablar. Después de muchas horas sin poder dormir, cierra los ojos y descansa plácidamente. A partir de ese momento, Yolanda forma parte del equipo asistencial, está dentro del box con su marido prácticamente todo el día, nuestra UCI ya es “abierta”.
Pasan los días y la desesperación por salir de la UCI es el deseo incontenible de abrazar a sus hijas. Ha podido hablar con ellas gracias a la válvula fonadora de su traqueostomía y ...¿Por qué no? En nuestra UCI los pacientes ya pueden tener su teléfono móvil.
Pasan los días y la desesperación por salir de la UCI es el deseo incontenible de abrazar a sus hijas. Ha podido hablar con ellas gracias a la válvula fonadora de su traqueostomía y ...¿Por qué no? En nuestra UCI los pacientes ya pueden tener su teléfono móvil.
Pero no es suficiente. Unos preciosos ojos brillantes con la inocencia de sus 12 años, llenos de emoción y amor esperan en la sala de familiares, desde hace demasiados días.
Abrazar a papá.
28 días de lucha desesperada por la VIDA, a la vuelta del infierno: miedo, angustia, ansiedad...Y entró a verlo “su niña”...Y en el box se oyen risas y besos, lágrimas de alegría y “te quieros”.
Al otro lado del cristal, los del pijama verde, con un nudo de emoción en la garganta y la satisfacción de haber hecho algo bueno. Pequeños pasos que rompen grandes barreras.
28 días de lucha desesperada por la VIDA, a la vuelta del infierno: miedo, angustia, ansiedad...Y entró a verlo “su niña”...Y en el box se oyen risas y besos, lágrimas de alegría y “te quieros”.
Al otro lado del cristal, los del pijama verde, con un nudo de emoción en la garganta y la satisfacción de haber hecho algo bueno. Pequeños pasos que rompen grandes barreras.
No separemos a las familias en el momento más duro de sus vidas.
Dra. Maria Rojas
Médico Intensivista
Médico Intensivista
Hospital Comarcal Infanta Margarita, Córdoba
NADIE...
ResponderEliminarNadie tiene derecho a impedir que los familiares ejerzan su rol de familiar.
Enhorabuena y gracias por el relato María.
Buenas tardes a tod@s
ResponderEliminarBien María. Una foto fija de un perseguido anhelo.
"No separemos a las familias en el momento más duro de sus vidas. Abriendo las puertas de la UCI".
El objetivo de la Ética y el Derecho no es otro que el de garantizar la protección de valores que los seres humanos estimamos tanto, y asegurar su promoción en la sociedad, para disfrute de todos sus miembros. Entre esos valores: la VIDA, la SALUD y el BIENESTAR.
En 1927 Freud, en su libro "El porvenir de una ilusión", creía estar firmando el certificado de defunción de un valor, el religioso. Han pasado noventa años, y no es sólo el porvenir del valor religioso, sino también el de todos aquellos que la filosofía ha considerado como VALORES INTRÍNSECOS o VALORES EN SÍ, y que son contrapuestos a otros que reciben los nombres de valores "instrumentales" o valores "por referencia". Este es el caso de todos los VALORES TÉCNICOS.
Hay cosas que valen por sí mismas. Aristóteles, al comienzo de la "Ética a Nicómaco" dice: "Es evidente, pues, que los bienes pueden decirse de dos modos: unos por sí mismos y otros por éstos, separando, pues, de los bienes útiles los que son bienes por sí mismos". (Et Nic. I 6: 1096).
Para Heidegger, la civilización de Occidente llevó a cabo en el siglo XVIII una opción preferencial por los valores instrumentales, en detrimento de los intrínsecos. Vivimos en la cultura tecnocientífica que nos lleva al antikantianismo del imperio de los medios sobre los fines. Es la nueva filosofía. Las cosas tanto valen cuanto cuestan. Y los seres humanos también.
Por consiguiente "demosle la vuelta al calcetín", dimensionemos en valores intrínsecos, ya que los valores técnicos así lo pueden posibilitar. Si verificamos este extremo podremos ver de nuevo que a nuestro estagirita no le falta razón desde hace 2.500 años.
Gracias.
Félix José Martín Gallardo.
swx20088@gmail.com
Preciosa historia: cuando los familiares se convierten en miembros del equipo para beneficiar al paciente.
ResponderEliminarSin olvidar que también debemos cuidar a la familia, quienes muchas veces son los grandes apartados de las unidades, pero en la UCI descaradamente. Estamos cambiando, todavía queda mucho por investigar acerca de los más humano, aquello que solo la familia puede aportar.
Alumna de enfermería de la UCI del Hospital Infanta Leonor y seguidora del proyecto HU-CI.
Mi correo es luciadelatorregil@gmail.com y estoy realizando un Proyecto de Investigación como Trabajo de Final de carrera relacionado con la comunicación con las familias de los pacientes críticos.
Estaría encantada de recibir información acerca del tema.
Un saludo.