english

sábado, 14 de junio de 2014

Coches, volantes y otros servicios

A diario realizamos actividades por simple rutina. Una de ellas es conducir. Arrancamos el coche y empezamos un camino lleno de probabilidades a las que tenemos que ir dando respuesta.Te ajustas el cinturón, nivelas los retrovisores, acomodas el asiento y tras poner las manos en el volante, inicias la marcha.


¿Cometemos errores aún siendo una actividad realizada diariamente?
Por supuesto. Pequeños e imperceptibles traspiés que en algunos casos ni siquiera somos conscientes de ellos.
Lo mismo debió suceder con mi riñón. Aún siendo “una conducción complicada” era una conducción sumamente conocida y nadie, absolutamente nadie en aquel quirófano, se dio cuenta de que alguien había cometido un error.
Dicen que el dolor después de una operación como la mía es normal aún siendo drogada con todo tipo de medicamentos.


Pero ¿Qué dolor es normal? ¿El dolor de espalda? ¿El dolor de piernas? ¿El dolor de garganta? ¿El dolor de huesos? ¿El dolor de cuando te mueven para asearte en la UCI? ¿El dolor de la zona operada? ¿El dolor del dolor?
Pues sí, para los profesionales todo ello es normal porque están realizando la misma ruta de siempre creyendo que se conduce el mismo coche de siempre y se olvidan de que hoy el coche es nuevo y su mecanismo variable al resto. En la UCI encontraron una solución a mí EXAGERADO dolor y cuando llegué a planta lo primero que dieron a entender es que no me quejase tanto que no podían estar tan pendientes de mí como en la UCI…. Sentí un quejío flamenco en mi alma… ¿aún iban a pasar más de mi que en la UCI? Miedo.
El remedio de Cuidados Intensivos fue remedio utilizado también en planta pero como siempre, actividad rutinaria = ¿conducción segura?
Menos mal que llegó UN VOLANTE.

No sé cómo se llamará en otras zonas al profesional de enfermería que puede realizar su trabajo en casi todos los servicios de un hospital pero en mi zona se llama así: Enfermero Volante. Tras toda una noche conduciéndome emocional y físicamente hacia la tranquilidad y el no dolor con sus atenciones, respuestas seguras y eficacia, notó que algo iba mal, muy mal.
El remedio consistía en hacerme lavados vía sonda urinaria para eliminar posibles restos sangrantes de la operación, así estuvimos todo el tiempo de UCI y dos días de planta…. y por esta vía MI VOLANTE vio que me estaba desangrando poco a poco.

Operación de urgencia. Causa, fisura en el riñón. No sé si el riñón vino ya con el error incrustado o lo cometieron allí, da lo mismo.
A mi familia y a mí lo que nos importa de verdad es que ante los percances se ponga pronta solución.

Que la rutina no sea cultivo de pasividad, pasotismo o mal humor.

Mi Enfermero Volante supongo que no tenía tiempo de caer en la rutina si a cada turno veía a unos nuevos pacientes, unos nuevos compañeros, un nuevo lugar de trabajo. Mi volante estuvo alerta y supo reaccionar. Mi volante me salvó la vida que, de verdad, en aquellos momentos, y por lo poco que recuerdo ya que estaba semiinconsciente, noté escasa.

Tuve la oportunidad casual de darle las gracias. No hay de qué dijo.

Y a estos enfermeros/as les dedico hoy mi post para que sean ejemplo,  A TODOS LOS NIVELES,  de conducción profesional y es que, como se dice por aquí, un volante como éste es “del millor, lo milloret” (de lo bueno, lo mejor).


Ali Matz
 



2 comentarios :

  1. Ali estoy contigo en dar las gracias a esos profesionales sanitarios que están pendientes de nosotros ( ojala los hubiera tenido en quirofano y no hubiera tenido secuelas algunas recuperables con la paralización de un brazo , lo que no se recupero fue la fistula arterio -venosa, también dar las gracias a ese donante que tubo la voluntad de donar y que no llego a su fin su cometido . En definitiva dar la gracias a todos los sanitarios que están pendientes de los pacientes .
    Una Amiga.

    ResponderEliminar
  2. Mónica Juncos Gozalo15 de junio de 2014, 7:56

    Muchas gracias, es reconfortante leer que cada dia hay profesionales que trabajan por el paciente y que luchan por dignificar la profesion.

    ResponderEliminar